En este blog aparecen algunas imágenes que encuentro por internet que,normalmente, son acompañadas del nombre de su creador. Sólo intento transmitir mi amor por el Arte, pero si alguien no quiere que aparezcan sus imágenes aquí sólo tiene que decírmelo e inmediatamente serán retiradas.

lunes, 9 de enero de 2012

SENSACIONES XIV

Aquello de que "nada dura eternamente" es de esas frases tan verdaderas en su sencillez, que apenas nos paramos a pensarlas por la evidencia de su significación, como que "el sol sale todos los días" y que "nadie escapa a la muerte". Es una verdad asumida en el devenir de los tiempos por su repetición e incorruptibilidad, por lo que nuestro subconsciente ya nos predispone a las "pérdidas" mucho antes de que pasen, sobre todo a partir de cierta edad en la que ya venimos de vuelta de todo, incluidas pérdidas inesperadas que conllevan un sufrimiento que, de haber tenido interiorizada ya esa premisa, era fácilmente mitigable.
Pero a pesar de esta predisposición a la resignación, es inevitable la añoranza por lo perdido y con demasiada frecuencia nos aferramos al recuerdo, fantasma traidor de un pasado ahora inexistente, cuando lo mejor sería mirar para cualquier otro lado y sustituirlo por las miles de vivencias que nos rodean y están ahí esperando por nosotros...

Taj Mahal
(terminado en 1654)
Se me viene a la cabeza el Taj Mahal, considerado como una de las mayores demostraciones de amor, cuando en realidad es un enorme y costoso (y bello por supuesto) monumento conmemorativo a la pérdida... Encargado por el emperador Sha Jahan a raíz de la muerte de su esposa favorita, es un complejo de edificios entre los que destaca el mausoleo, todo él de mármol blanco, con una hermosa cúpula de tipo "cebolla", que hace de foco visual del conjunto y materializa el alto grado de melancolía que el emperador sentía y que hizo posible tan magna construcción. Irónicamente el edificio sobrevive al amante esposo y a sus recuerdos, lo que me hace de nuevo pensar en que "nada dura eternamente", ni el amor ni la demostración de ese amor, y por extensión los sentimientos y sus materializaciones, a no ser que sean de mármol blanco y estén protegidos por la Unesco...

miércoles, 4 de enero de 2012

2012 AÑO DE KLIMT

Como no podía ser de otro modo, mi primer pensamiento del 2012 para este blog está dedicado a uno de mis artistas favoritos, Gustav Klimt, pues desde mi más modesta opinión lo considero uno de los más altos representantes del modernismo, no sólo vienés, al menos en lo que se refiere a su faceta como pintor y muralista, porque también tengo que reconocer que la arquitectura Art Nouveau belga y el Modernismo español, con sus regionalismos, me fascinan. En cualquier caso, me enamoré de su archiconocido "Beso" y su "Arbol de la vida" hace ya mucho tiempo, y contemplando sus obras siempre he encontrado algo nuevo y sorprendente en su producción.

"Arbol de la vida" (1909)
El 14 de julio de 1862, vino a nacer en un pueblito cerca de Viena el segundo hijo de una familia abocada a saltar a los libros de Historia por gracia de alguno de sus miembros, o mejor dicho por el Arte de alguno de sus miembros, pues tanto sus hermanos como sus padres mostraban inclinaciones artísticas; pero la fortuna y, sobre todo, la "excelencia" hizo que fuera Gustav quien saliera del anonimato y de la pobreza de manos de una beca para estudiar en la Escuela de Artes y Oficios de Viena, la  Kunstgewerbeschule. Este insigne lugar de nombre tan difilcultoso fue el que vió crecer como artista al joven Klimt y lo encaminó a ser, años después, miembro fundador de la Secesión vienesa (1897), rebelándose contra un concepto del Arte que ya estaba obsoleto; tal y como rezaba en la puerta de entrada a la sede de la Secesión en Viena: "Der Zeit ihre Kunst-der Kunst ihre Freiheit" ("A cada época su arte. Al arte su libertad"). El movimiento moderno empezaba así a cambiar el arte europeo, rompiendo con la tradición academicista y llevando a la práctica sus ideales de libertad y naturalismo, fiel reflejo de un contexto histórico en el que el pensamiento liberal y el auge de la burguesía eran los protagonistas.
Sede de la Secesión en Viena (1897)
Joseph Maria Olbrich
Para celebrar el 150 aniversario de su nacimiento, Viena va a exhibir en sus museos durante el recién estrenado 2012, el orgullo de ser la ciudad que legitimó al artista: el Belvedere, el Kunsthistorisches Museum, la Künstlerhaus, el Museo Leopold, entre otros, mostrarán la vida y obra de Gustav Klimt a todo aquel afortunado que tenga a bien viajar al país de los valses. Yo voy a intentar ser una de esas afortunadas, aprovechando cierto viajecito que tengo pendiente este año, y llegaré al éxtasis espiritual delante de "El Beso" en el Belvedere, porque por más que le echo imaginación, la reproducción que tengo en mi dormitorio sólo me alcanza para un cierto goce estético.